El Premio Nobel portugués fue el encargado de dar la bienvenida a la nueva institución, una institución que deseó fuese fecunda a la hora de abrir nuevos caminos y proyectar la literatura más allá del propio escritor, partiendo de su legado. "Sabemos que Umbral era un poquito vanidoso", señaló con humor, "pero le hubiera gustado que su Fundación fuera un instrumento de proyección, de camino hacia adelante, que no se quedara paralizada en una especie de autismo en torno a sus propios huesos".Inevitablemente, el periodismo, territorio en el que Umbral se erigió como un maestro, se convirtió en el centro de las intervenciones.
Saramago recordó que cuando llegó a España, conocía la cultura y la Historia de nuestro país, pero que desconocía el alto nivel del periodismo que practicaban columnistas como Umbral, Raúl del Pozo y Manuel Vicent.
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sexta-feira, 26 de junho de 2009
Saramago destaca la estirpe del columnismo capitaneado por Umbral
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